El lenguaje es una de las funciones cerebrales superiores que presenta una compleja evolución, ya sea en su adquisición como en su desarrollo. Los aspectos del lenguaje son el expresivo y comprensivo, y las dimensiones del mismo son la forma, el contenido y el uso social. La evaluación es un proceso funcional, sistemático, continuo e integral que permite llegar a diagnósticos certeros que nos orientan a enfoques terapéuticos precisos de acuerdo a los déficits hallados. El objetivo principal de la evaluación es identificar que aspectos del lenguaje de hallan afectados y cómo se expresa esa afectación. Es importante identificar si hay retrasos o trastornos del lenguaje, pero también la evaluación nos provee de información para luego realizar las intervenciones necesarias y el tratamiento adecuado.